Buenos Aires playa, Buenos Aires verde, Buenos Aires desalojo… Por Virginia González Gass

La diputada Virginia González Gass (Partido Socialista Auténtico en Fa-UNEN) expresa su preocupación por el desalojo de las personas que viven en la plaza Cecilia Grierson, en el barrio de San Telmo.

“Lo que hace Mauricio Macri es echar a los pobres fuera de la Ciudad o meterlos en instituciones de absoluta precariedad y desprecio por una vida digna, en lugar de diseñar políticas integrales que garanticen el acceso a la vivienda“, señaló González Gass.

“En sus 7 años de gestión Mauricio Macri limitó todo esfuerzo para dar una respuesta de fondo a la crisis habitacional. Prefiere optar por soluciones al paso como el uso de paradores o subsidiar el poco claro negocio de los hoteles familiares”, agregó la diputada socialista.

Según un relevamiento de la ONG ” Médicos del Mundo”, en el periodo 2011-2012 había 16.353 personas en situación de calle en la Ciudad de Buenos Aires. Lo curioso del caso que para este 2015 se redujo la asignación prevista para el Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC), a pesar de reconocer el propio gobierno de la Ciudad un aumento de la población en villas de un 70% en los últimos 4 años.

Todos los años, Mauricio Macri espera la llegada del verano para realizar estos abominables operativos. Todos los años incumple las leyes de urbanización de villas. Todos los años deja a niños sin vacantes en las escuelas.

En esta oportunidad, el golpe es doble: echa a los pobres de la plaza y destruye el tejido social de la red de contención comunitaria como el Centro Educativo Isauro Arancibia -cercano a la plaza ubicada en Av. San Juan al 600-, una institución que procura instrumentar soluciones allí donde el abandono macrista no llega.

La pompa amarilla pone cercas y vallados, bares en las plazas, reposeras y sombrillas, bajo el machete de operativos odiosos que ignoran los derechos y garantías de las familias en situación de calle que, aunque el gobierno de la Ciudad lo niegue, también son ciudadanos.

Mientras tanto, el ministerio de Desarrollo Social se tomará una semana para ver qué hace con los “okupas” del espacio público.